Llegué al hotel después de esa excitante cita con la chica mas morbosa
que jamas había conocido.Tan morbosa y a la vez con un trato que te hace
sentir que es mas que una simple vendedora, es cómplice del morbo, esa
confianza que me dio desde el primer momento no la encontré en nadie
mas.
Recordando como bajaba sus bragas con mi boca, teniendo tan cerca esa
fuente eterna de placer que emanaba un flujo capaz de envolverte y
embriagarte, hace que mi polla se vaya poniendo dura y quiera beber
directamente de la fuente que tan cerca tuve.
Con sus bragas puestas, estoy sentado acariciándome los huevos por
encima de esa tela que huele a una esencia que sólo una Diosa puede
tener. Allí sentado, en la soledad e intimidad de la habitación del
hotel,oliendo su aroma y mirando el tampax.
Era la primera vez que iba a
meterme algo por mi culito, me excita pero a la vez me da miedo, aun
siendo pequeño, no sé si me producirá daño... me viene a la mente el
momento en el que salí detrás de ella del probador, con sus bragas
puestas y sabiendo que ella no llevaba.
Lo cojo, sin pensarlo, escupo sobre mi mano y me salivo bien el culo, me
lo acerco a la entrada cuando pienso que es mejor chuparlo un poco y
así entrará mejor.
De pie, suspirando cojo fuerzas, me bajo las braguitas y me lo voy
introduciendo poco a poco, sin notar dolor, tan sólo un pequeño placer
según entra en mi culo, lo relajo al saber que no me hará daño y empiezo
a follarme el culo. Era una sensación muy agradable, no era para nada
como me imaginaba. Estuve un rato metiéndolo y sacándolo de mi agujerito
hasta que decidí, por fin, dejarlo dentro para ver lo que se sentía al
tener el culo lleno por algo tan femenino.
Me incorporé y me puse de nuevo las braguitas, quería que mi polla se
quedase dentro, pero con tal excitación era imposible. La cita con ella,
la confianza que inspiraba y sobre todo su morbo hacía que con sólo
pensarlo mi pene se endureciese. Yo esperaba ir a una cafetería y que alli mismo me las diese, pero terminé quitándoselas con mi boca,
viendo de cerca ese culazo que me quedé con ganas de probar, aunque
podía notar toda su esencia en la braguita.
Apretaba el culo para notar
el tampax que me lo llenaba, y entonces se me ocurrió hacerme una foto
para que viera que había sio capaz
de ponerme el tampax. Quería compartir ese momento con ella aunque no
estuviese allí para verlo. Le escribí un email para explicarle, de forma
detallada, como me sentía y lo que hacía. Le comenté que la cita me
encantó, no me esperaba llegar a quitarle yo mismo las braguitas con la
boca y menos aún salir con ellas puestas.
Ella es diferente, sin duda, le encanta morbosear y compartir las
experiencias, le encanta saber como disfrutan los demás con su esencia y
cuando la vas conociendo más morbosa te parece. Ahora recordaba el
contoneo de sus caderas al caminar mientras se marchaba, pensando como
debería ser ser follarse ese culo. Si lo movía así al caminar que podría
hacer esta Diosa en la cama, con su cuerpo de infarto, morbosa y
viciosa como parecía...
Mientras escribía recordaba su intensa mirada, solo con eso ya me tenia
dominado. Le expliqué paso por paso como había sido mi desvirgamiento
anal con el tampax, apretaba el culo para notarlo y no dejar de sentir
ese placer tan agradable que me proporcionaba.
Me resultaba incomoda la
sensación de tener mi polla fuera de la braguita, pero no había manera
de que se quedase dentro por lo dura que estaba, me las quité y me las
puse de mascara para oler directamente esa esencia de Diosa. Sentado,
delante del ordenador, con sus braguitas como máscara y mi culito lleno,
entré en su blog y vi que había puesto un video de strap-on nuevo muy
sugerente, no puede evitar verlo y soñar como si fuera ella misma la que
me penetrara y fuera ella quien me desvirgara mi novato culo.
Primero el tío le comía la polla de goma a la tía, que le cogía de la
cabeza metiéndole a la fuerza esa gran polla, a el le caían las lágrimas
y babeaba como un perro rabioso, pero por la cara que tenia estaba
disfrutando, ella le marcaba el ritmo con los tirones de pelo, apretaba
su cara y su culo para metérsela entera llegando a una buena arcada.
Luego lo cogía de los pelos, lo puso de pie, poniéndose en frente de él
empezó a darle bofetadas por lo baboso que había sido. Luego le ordenó
ponerse a 4 patas y que se empezara a follarse el mismo, ella no se movía, lo único que hizo fue escupirle en el culo para
que le entrara mejor... así, viendo el vídeo, no pude evitar correrme
al pensar que era la que me follaba mi culo mientras tenía sus bragas en
la cara, oliéndola a la vez que me follaba, que sensación... me inundó
una oleada de placer incontrolable que nunca
antes había sentido.
Mientras me corría aspiraba bien fuerte para que su aroma me llegase lo
más dentro posible y movía el culo para notar ese placer maravilloso, la oleada de placer incontrolable duró como unos 30
segundos, pero fue tan intenso que me pareció como si hubiese pasado
media hora.
Después de esa inmensa sensación de placer me vino el bajón y un sueño
que podía con mis párpados que se cerraban solos. Limpie la corrida que
salió, la mas grande que nunca había echado. Saboreé las braguitas de la
cara y me las puse para dormir con ellas y con el tampax, para hacerle
ver que si había sido capaz de cumplir su deseo.
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